domingo, 7 de diciembre de 2014

Pensamiento 21.

Cuando todo son patadas por parte de la gente, lo único que llegas a hacer es encerrarte en ti mismo, aguantar el dolor de manera que llegue un momento en el que no lo sientas, al igual que un espartano. Lo único que hace ese dolor es cegarte de odio. Pero luego, cuando menos te lo esperabas, aparece alguien que te tiende su mano y lo único que piensas es que es un ángel enviado por los dioses para iluminar un poco tu camino y al fin llegues a tu destino. No sé cuál será mi Ítaca, pero espero que dure mucho esta odisea.




Hazme un sitio en tu colchón,
quiero vivir en él, así oler tu respiración.